Sentí que una mano me agarraba la parte de atrás de la camiseta, lo suficientemente fuerte para que yo dejase de caminar

 

Comencé a girar de nuevo bajo las cortinas, sin poder ver nada y empecé a andar. Entonces sentí una mano que me agarraba la parte de atrás de la camiseta, lo suficientemente fuerte para que yo dejase de caminar, de repente sentí otra mano muy diferente a la otra que tiraba hacia atrás de la cortina que tenía puesta sobre la cara, dejando ver que yo estaba justo en el borde de las escaleras, a punto de caer.

 

Cuando me giré, pensando en que había sido mi madre o su tía las que me habían agarrado, vi que estaba yo sols en aquella habitación, que no había nadie, nada. Así que me asusté tanto que bajé las escaleras gritando. Fue entonces cuando la tía de mi madre decidió contarme que hacía unos 80 años, una mujer, a pocos días de su boda, perdió la vida en el segundo piso. Nunca le hacía daño a nadie, pero a veces la veían junto a la ventana mirando hacia fuera, o paseando por la planta de arriba. La verdad que le doy las gracias por ayudarme y no dejar que me rompiese la cabeza por las escaleras, pero recuerdo que siendo una niña me asusté mucho".

"Mi bisabuela murió cuando yo tenía 7 años. Nos llevábamos genial y nos queríamos muchísimo, además vivíamos muy cerca. Siempre olía a jabón perfumado de limón y era mi olor favorito. Cuando murió me costó conciliar el sueño durante una temporada y mi padre me cantaba para consolarme y dormir. Una noche olí algo de limón y me quedé dormida. No lo había vuelto a sentir desde hacía ya un año, cuando ella falleció. Sentía una mano en mi espalda que me tranquilizaba y el olor volvía cada noche para calmarme. Resultó que mi padre puso en el respiradero una barra de jabón igual que la tenía mi bisabuela, aunque no me lo contó hasta mucho tiempo después. También le conté lo de la mano en mi espalda y él me confesó que mi tatarabuela solía hacer lo mismo por él hasta que lograba dormirse. No sé quien era, si mi bisabuela o tatarabuela, pero lo sentía cada noche y me ayudaba a descansar".


Manuel Alfonso Delgado Parrales



Comentarios